A inicios de este verano pasé un mes en Indonesia, mi tercer país en este periplo viajero.
Los últimos días los pasé en la isla de Lombok. Y en esos días se concentró lo mejor y lo peor de un país que está claro que no me dejó indiferente.
Lombok es fantástica, exuberante, auténtica, cautivadora y poco explotada turísticamente, todavía. Así que visitarla debería ser obligado en cualquier viaje por el país.